viernes, 15 de febrero de 2008

Manos a la Obra!!!

Bienvenidos nuevamente!
Queremos darle las gracias por sus saludos y todo el aliento que nos dan a diario.

Hoy estamos muy contentos de poder compartir la noticia de que nos estamos moviendo y preparando para poder ayudar a una familia del Barrio Santa Maria, en la localidad de Pilar, Provincia de Buenos Aires.

Para ello estamos buscando que nos ayuden con materiales de construccion, con precios al costo de los mismos quizas, o bien alguna donacion monetaria para poder adquirlos.



Todo el que quiera y pueda ayudar, con lo que considere que pueda responder a nuestra necesidad, comuniquese con nosotros a unafamiliayunavivienda@gmail.com o a los telefonos 011-1567425434 o bien al 02322-421658

Muchas gracias por leer, un abrazo de Paz y Bien

Claudio Fuentes, Familia y Amigos

martes, 12 de febrero de 2008

Dar? Darse!!!


Hoy queriamos compartir un tesoro con el que nos encontramos en el blog de un Techo para mi Pais. www.untechoparamipais.org.ar/blog/blogs/
Con el mismo, queremos seguir poniendole nombre al deseo de compartir con los hermanos mas pobres, deseo que Dios nos regala.

Una vez la Madre Teresa de Calcuta estuvo de visita en Seattle. Se dice que al bajar del avión una limosina blanca la estaba esperando para llevarla a uno de los mejores hoteles de la ciudad. La invitación era de un poderoso empresario de multimedios, que se decía fanático admirador de la obra de la religiosa. Cuando le dio la bienvenida y le puso todo a su disposición, la madre Teresa de Calcuta le agradeció diciéndole que no se sentiría cómoda en uno de sus hoteles de cinco estrellas si había venido a la ciudad a hablar de los homeless, de los sin techo y que prefería viajar en la camioneta de la congregación que la había venido a buscar. El hombre le dijo que lo lamentaba pero que comprendía. Le rogó que, por lo menos, aceptara su invitación a cenar en su residencia, habría allí gente muy importante que quizá podría colaborar mucho con su orden en la India. La madre Teresa le volvió a agradecer y le dijo que no podía ser, que ella había venido por los desposeídos, por los sin techo, por los que pasaban hambre en las calles de las ciudades y no para recaudar fondos para su orden. El hombre se sintió decepcionado, con verdadero deseo e ignorancia preguntó (debía haber algo que él pudiera hacer por ella...). La respuesta fue: - " Sí. Hay algo que puedes hacer por mí. Sal en tu automóvil mañana muy temprano, recorre tu ciudad y estaciónate cerca de alguno de los que duermen en los zaguanes de las casas o en las bancas de las plazas cada noche. Baja del auto, siéntate y háblale. Quédate a su lado todo el tiempo que sea necesario y no te vayas hasta que no estés seguro de haberlo convencido de que no está solo. "